Imitación de Spirits: El Valor de lo Auténtico
En todas las denominaciones de origen se disponen de diferentes organismos de control y verificación de la autenticidad de los vinos y espirituosos que se producen en la zona. En particular, en el Marco de Jerez - Jerez de la Frontera, El Puerto de Santa María y Sanlúcar de Barrameda – se encarga el Consejo Regulador de la D.O. ‘Jerez Xeres Sherry’.
“El Consejo Regulador verifica y le asigna un número identificativo e individual a cada botella que se produce en el Marco”, cuenta Marcelino Piquero – director comercial de la bodega Sánchez Romate -. “De hecho, para garantizar la neutralidad en la evaluación se contrata a un organismo de control externo totalmente independiente de la bodega y del Consejo Regulador. Esta organización envía inspectores y pruebas de laboratorio para vigilar la autenticidad del producto”, agrega Marcelino.
Y es que en cuestión de seguridad, preservación de la tradición y del prestigio de la zona todos los esfuerzos por garantizar que el comprador final adquiera un producto auténtico son necesarios. Se estima que el 5% de las bebidas espirituosas vendidas en el mundo son falsificaciones, y el 25% de las que llegan a Asia no son auténticas.
Ante esta situación, Marcelino nos da una serie de consejos a tener en cuenta cuando se trata de adquirir una botella de vino o brandy.
“En primer lugar, se aconseja revisar el etiquetado de la botella para asegurarse que posee el sello distintivo del Consejo Regulador el número identificativo de la botella – podemos decir que es el DNI de la botella -. Éstos tienen que estar en un lugar visible según la normativa vigente. Normalmente están situados en la etiqueta posterior de la botella”, agrega Marcelino.
Además de estas medidas internas de la zona de producción, cabe destacar que el Consejo Regulador hace sus labores bajo la tutela del Gobierno Español, y éste a su vez, depende de organismos pertenecientes a la Unión Europea.
Como puedes ver, existen una serie de medidas que es conveniente conocer para evitar se engañado, y que con un simple golpe de vista a ambas etiquetas puede hacernos evitar algún que otro quebradero de cabeza.
Así que la próxima vez que adquieras cualquier tipo de vino con denominación de origen, o en el caso de los brandies, un Cardenal Mendoza, tómate 15 segundos para
asegurarte que la botella que tienes entre las manos es de la calidad y finura que nos caracteriza a través de las pautas que te hemos numerado.
Una vez que sabes que todo está en orden, ya solo queda una cosa:
¡Servirte una copa y brindar!
Por cierto, si ya dispones de un Cardenal Mendoza o tienes intención de probarlo próximamente, te recomendamos que eches un vistazo a este post que te hemos preparado sobre cuál es la mejor manera de disfrutar un buen brandy.
¡Que lo disfrutes!
